LA IMPORTANCIA DE HACER LO CORRECTO

Por: Patrícia Guevara

                                

“Y harás lo recto y lo bueno a los ojos del Eterno, para que te vaya bien, entres y heredes la tierra buena que ha jurado el Eterno a tus padres” Deuteronomio 6:18

Que es hacer lo recto y bueno? El termino recto en este texto viene del hebreo “Yashar” que significa justo, por lo tanto hacer lo recto es actuar en base a la justicia. Debe usted tomar en cuenta que el gobierno de Dios esta asentado sobre tres fundamentos que son: La verdad, la misericordia, y 
su Justicia.

Dios demanda de sus hijos actúen o hagan conforme a la justicia, ya que El es Justo. El hombre que actúa con justicia es calificado en el reino de Dios como “justo”. El hombre que no actuar conforme a la justicia de Dios sino que quebranta todos los principios y leyes de convivencia se le llama impío. 

Estos termino son formas que se manifieste en la biblia para calificar la forma de proceder de los hombres ante Dios o su prójimo. Por lo tanto se le llama justo(zadid) aquel que actuó justamente con su prójimo, se le llama impío aquel que actúa injustamente con su prójimo. 

Hacer lo bueno indica hacer el bien, buscar hacer todo en pro del bienestar común, hacer lo mas 
favorable, lo mas agradable, lo mejor en todo. Lo contrario a lo bueno es lo malo. 

Dios quiere que sus hijos hagan lo bueno, hagan lo mejor, lo mas favorable que pueda proveer bienestar común. Una persona es buena cuando su obrar resulta apropiado al género humano, según lo que cada cultura valora como positivo, o cuando cumple las normas morales, sociales, o jurídicas de la comunidad que integra.

La palabra de Dios se refiere a los que actúan con justicia y bondad de la siguiente manera:

“Porque el Señor cuida el camino de los justos, mas la senda de los malos lleva  al perdición” Salmo 1:6

“Porque tu, Señor, bendices a los justos; cual escudo  los rodeas con tu buena voluntad” 
Salmo 5:12

Ten cuidado de quien te aconseja mal para manipularte.

Cuanto más progreses en la vida, más personas habrá que quieran controlarte. Creerás que sus amenazas son reales, y te intimidarás pensando en las consecuencias de no hacer caso de ellas.

No digo que no debes escuchar los buenos consejos pero debes estar muy atento para discernir quién te dice algo para manipularte, o realmente para aconsejarte en lo verdadero y justo. Tampoco es que te digo que seas un rebelde y no te sujetes a tus autoridades, pero todo hay que hacerlo con mucho discernimiento espiritual, recuerda que estamos viviendo tiempos muy peligrosos doctrinalmente y hay muchos lobos en medio De la Iglesia.

Observa a Sadrac, Mesac y Abed-nego. Su compromiso con Dios hizo que acabaran en un horno ardiente calentado siete veces más de lo acostumbrado. 

Pero también ese mismo compromiso los promovió a una posición de gran bendición e influencia. La historia de estos jóvenes nos enseña que la verdadera prueba donde se revela tu carácter es aquella situación cuyo resultado está fuera de tu alcance. 

En esa coyuntura, lo único que haces es elegir lo que es correcto delante de Dios, aunque muchas veces esto te lleve a queda mal con los hombres, y luego dejar que Dios se ocupe de las consecuencias y de hacerte justicia. Esto también es una prueba de fuego para ti, la cual también te refina y te hace más fuerte en el proceso.

Cada vez que haces lo correcto y aceptas el sendero por el que Dios te ha llamado a caminar, en lugar de evadirlo, entras en una nueva dimensión de libertad. Tal como lo comprobaron Sadrac, Mesac y Abed-nego, te ocurren estas tres cosas:

1) Quedas libre de los “Nabucodonosores” que creen tener el control de tu vida. 

2) Quedas libre para poder decir “no” a los que intentan manipularte y usarte. 

3) Quedas libre para servir al Rey Todopoderoso y decir que no a todos los otros impostores que no tienen ningún autoridad sobre ti. 

En ese momento entenderás no sólo quién eres, sino lo que es más importante, a Quién le pertenece, y Dios hará una de estas dos cosas: o bien desarrollará tu carácter en el horno de fuego, o bien te sacará ileso del mismo. ¡O quizás haga las dos cosas! Habrás madurado en la fé y Sarai cuál es tu ruta a seguir y cuándo y donde hacer lo correcto delante De Dios.

Shalom.

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